Actualmente viven en nuestro planeta unas 300.000 especies de vegetales, distribuidas por todos aquellos hábitats de la Tierra donde la vida es posible. Cada una de estas especies necesita para vivir ciertas condiciones de luz, de calor, de humedad, etc. En CurioSfera-Ciencia.com, te explicamos cómo y dónde viven las plantas.
Ver cómo se alimentan las plantas
¿Dónde viven las plantas?
Desde hace millones de años, las plantas han conseguido vivir en todos los lugares de la Tierra donde la vida es posible. Incluso en lugares como los fondos marinos, que reciben muy poca luz. También en las altas cimas de las montañas que no están heladas permanentemente, las plantas han sabido adaptarse a las diferentes condiciones de vida que ofrece nuestro planeta.
Dónde viven las plantas acuáticas
Flotando en el agua o fijadas en los fondos rocosos y arenosos, viven muchas plantas de organización bastante sencilla. No tienen raíces ni tallo ni hojas. Muchas son microscópicas, y otros llegan a hacer algunas decenas de metros.
Estas plantas acuáticas de organización sencilla se llaman algas. Pero no todas las plantas acuáticas son algas. Muchas plantas de organización más complicada, como los nenúfares y los lotos, también viven en las aguas de los ríos, los estanques y los lagos. Se pueden ver en muchos estanques de jardines, porque son muy bellas. Otras plantas, como la espadaña o boga, tienen las raíces en el agua, pero las hojas y los tallos son aéreos.
Dónde viven las plantas terrestres
Para vivir, las plantas terrestres necesitan un sistema que les permita captar el agua que hay en el suelo. Los órganos de la planta encargados de realizar esta operación son las raíces. La cantidad de agua que necesita una planta para subsistir es muy variable: cambia según la estación, según su punto de desarrollo y, naturalmente, es muy diferente de una especie vegetal a otra. Para poder vivir, la planta debe tomar el agua de la tierra y hacerla circular por el interior de su cuerpo.
Cómo se adaptan las plantas a la humedad
Las plantas que viven en zonas muy secas, como los desiertos o la arena de las playas, necesitan unas raíces muy desarrolladas que busquen el agua. Si midiéramos la longitud del conjunto de las raíces de una palmera de desierto, encontraríamos que hacen unos cuantos kilómetros. Estas raíces, o mejor dicho, sus pelos absorbentes, rodean los granos de arena y recogen la poca agua que puedan tener estos pegada a la superficie.
Cuando una planta se encuentra en un ambiente rico en agua, las hojas suelen ser grandes y lustrosas. Así ocurre en los bosques tropicales, donde la abundancia de las lluvias permite mantener un suelo con un grado de humedad muy alto. En cambio, en los lugares secos, las hojas suelen ser duras y pequeñas, para evitar la pérdida de humedad por transpiración.
Incluso puede darse el caso de que las hojas se atrofien, como ocurre con los cactus, las hojas de los cuales se han transformado en espinas pequeñas. Por ejemplo, las hojas de la retama se han reducido a pequeñas formaciones con aspecto de escamas.
Cómo se adaptan las plantas al frío
Ya sabes que ciertos árboles, los caducifolios, se protegen del frío del invierno perdiendo las hojas. Así se evita que las partes más húmedas de la planta se hielen durante los inviernos rigurosos. En algunas plantas herbáceas también ocurre algo parecido. En invierno, la parte aérea de estos vegetales se muere, y sólo permanece en un estado de vida latente la parte subterránea. Esta parte puede ser la raíz, como en el como el caso de la zanahoria o del nabo, o un tallo subterráneo, como el bulbo de las cebollas o los tubérculos de la patata.
¿Qué tipo de suelo necesitan?
El hecho de que una planta pueda vivir en un lugar determinado depende, como hemos visto, de la temperatura, la insolación, la humedad, etc. Ahora bien, que las plantas vivan en un lugar y no en otro también depende del suelo. Pero, ¿qué es el suelo?
La superficie rocosa de nuestro planeta está cubierta por una capa de fragmentos minerales y de materia orgánica. Encima esta capa, que llamamos suelo, viven las plantas, y dentro de ella se instalan las raíces. Bajo el suelo generalmente está la roca madre, es decir, la roca de la que proceden los componentes minerales del suelo.
La parte mineral del suelo proviene de la descomposición de las rocas. Según su tamaño, los fragmentos de las rocas reciben los nombres de guijarros, arenas o arcillas. Estos elementos minerales suelen aparecer mezclados y la proporción de cada uno determina algunas propiedades del suelo.
Así, la arcilla retiene el agua: es un material impermeable; la arena deja pasar el agua fácilmente: es un material permeable. Si el suelo tiene una proporción adecuada de arena y arcilla, el agua podrá llegar hasta las zonas más profundas, que quedarán abundantemente empapadas. La parte orgánica del suelo proviene de la descomposición de los restos de seres vivos que viven. Principalmente de las hojas de los vegetales. La porción orgánica de un suelo es mucho menos abundante que la mineral.
Muchos animales y plantas viven en el suelo. La mayor parte de estos animales son microscópicos, como las bacterias. Muchos otros son invertebrados, como los gusanos y los insectos, y también hay algunos vertebrados, como los topos.
Formaciones vegetales
Según lo que acabas de ver, parece lógico pensar que los vegetales que tengan las mismas necesidades y estructuras similares vivan en los mismos lugares. Efectivamente, esto ocurre. De esta manera se originan las formaciones vegetales.
Las principales formaciones vegetales son la selva tropical, el bosque de hoja caduca, el bosque de hoja resistente (hojas duras que no desaparecen en invierno), el matojo y el prado. Las plantas que componen una formación vegetal han sufrido una serie de adaptaciones que les permiten vivir fácilmente en las condiciones en que se encuentran.
Dónde y cómo viven las plantas resumen
- Las plantas viven en casi todos los lugares donde la vida es posible.
- En los mares y los océanos, viven algas. En los ríos, en las balsas y los lagos, viven algas y algunas plantas como los nenúfares y la boga.
- Para poder vivir en las condiciones propias de cada lugar, las plantas han sufrido adaptaciones y transformaciones durante muchos y muchos años.
- Las hojas de las plantas de zonas húmedas son grandes y las de las que viven en lugares secos son pequeñas; en algunos casos pueden reducirse a espinas.
- Las plantas se defienden del frío disminuyendo su actividad, perdiendo las hojas, o permaneciendo en vida latente la parte subterránea.
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